9 jun 2012

Motivación: base clave del éxito educativo



Bertrand Russell,  filósofo, matemático y escritor británico, Premio Nobel en Literatura en 1950 una vez dijo que “El sabio uso del ocio es un producto de la civilización y de la educación.” En la medida que usemos nuestro tiempo libre de manera inteligente, estamos construyendo un proyecto de vida exitoso.  Parte del éxito de todo individuo es fomentar su aprendizaje y saciar su sed de conocimiento.  Si bien es cierto, como dijo el precursor de la evaluación educativa, Ralph W. Tyler, que “el aprendizaje se da por medio de un comportamiento activo del estudiante … lo que él hace es lo que aprende y no lo que el profesor hace”, el papel del profesor en las aulas es tan importante como la voluntad del alumno en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Apoyo firmemente la propuesta del académico estadounidense Michael Scriven al decir que el aprendizaje es una responsabilidad compartida, que éste depende de cómo se ve el estudiante a sí mismo y que éste es mayor cuando el estudiante recibe refuerzo inmediato en cada paso, en cada momento.  La motivación intrínseca  despierta la curiosidad del aprendiz, el cual investiga y se informa para ampliar sus perspectivas.  Pero, ¿quién lo motiva  y lo guía a desarrollar una comprensión profunda para que compare, analice, relacione, generalice y produzca sus teorías e hipótesis? Este artífice es el profesor. 

Hay profesores de título y profesores de vocación.  Hay profesores que explican y profesores que intrigan.  Hay profesores que les dan todo a los alumnos sin dejar nada a la imaginación ni a la investigación y hay profesores que cultivan el gusto y despiertan el espíritu de aprender. Yo apuesto por aquel profesor que llega al aula con una sonrisa amplia y franca, que capta la atención de sus estudiantes no solo por medio de su presencia física, su voz, naturalidad y dinamismo, sino también, por su solidez, autoridad, disciplina y orden, por su entusiasmo por la materia y el interés por sus estudiantes, al ver seres humanos con limitaciones y problemas,  pero con potencial en frente de él.

Que estimulante puede ser aquel profesor que va moldeando a sus estudiantes al llevar propuestas que desarrollen su pensamiento crítico y el uso creativo de tecnologías como el portafolio electrónico, el cual es una excelente estrategia de enseñanza y aprendizaje.  Que apropiado es aquel docente que insta en los alumnos al uso de materiales didácticos tales como mapas conceptuales, videos, murales para delinear los temas estudiados desde una perspectiva concreta, práctica, e intuitiva. Que acertado es aquel docente que desarrolla su clase por medio de discusiones, trabajos grupales, debates, presentaciones teatrales, excursiones para observar, investigar y recoger datos. 

Como bien lo expuso Sócrates  “lo peor del ignorante no es que no sepa, sino que no sepa que no sabe”. Los profesores no pueden ignorar el papel tan relevante y significativo de la motivación en clase.  Es un hecho que el estudiante debe tener seguridad en sí mismo para alcanzar las metas de cualquier curso.  Si a los estudiantes se les refuerza y se les reconoce su esfuerzo y habilidades, ellos son capaces de controlar su aprendizaje y alcanzar el éxito en cualquier proyecto o asignación. El creer en ellos mismos los inviste de poder, los motiva, los engrandece.

Las aulas están llenas de estudiantes que son diamantes en bruto dispuestos a aprender, pero que necesitan guía para pulir sus competencias.   Sacarlos de esa oscuridad y enseñarles a reflexionar sobre el aprender a aprender es tarea titánica de todo docente.  Es por este motivo, que es imperante que los viejos y tradicionales paradigmas de la educación sean sustituidos, en la mente de los profesores, por la actualización de los nuevos métodos y objetivos de la enseñanza del siglo XXI.  Si el profesor hace caso omiso  a su responsabilidad de motivar al estudiante, se está negando a ser parte activa y factor de cambio de la sociedad de hoy y, peor aún, le está negando la oportunidad al estudiante de involucrarse de lleno en su propio proceso de aprendizaje, al no moldear el perfil del profesional del futuro acorde con los requerimientos de una sociedad globalizada y cambiante.


Bibliografía: 

Chapter 2 Engagement and Motivation

Video Teaching and Understanding

24 comentarios:

  1. Saludos Krisia
    comparto totalmente con usted el factor vocacion dentro de el esquema educativo. Si realmente valoraramos que lo que tenemos delante son seres humanos y no máquinas, entonces comprederíamos claramente la gran responsabilidad que tenemos. Cada individuo en frente nuestro es un esperanza para el planeta. Cada ser que logremos motivar y engacharse con el placer de aprender es un estudiante para siempre. Debemos de brindar los espacios, metodologías y competencias para que esa motivación sea efectiva.

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    1. Muchas gracias Marco por tu comentario.

      Que diferente sería el mundo si en las aulas formáramos estudiantes para siempre, aquellas personas con la sed de aprender y descubrir algo nuevo de manera permanente.

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  2. La motivación intrínseca es aquella fuerza que viene de adentro y nos motiva a conseguir lo que nos proponemos y la extrínseca tiene que ver con los estímulos externos que hay a nuestro alrededor que pueden generar un efecto positivo en nuestro proyecto.

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    1. Hola Ericka,

      Gracias por tu comentario. Veo que rescatas no solamente la motivación interna que todos los individuos tienen sino también aquella que genera el ambiente. En el engranaje educativo, todos los participantes del mismo aportan ideas, comportamientos, comentarios, propuestas significativas que hacen del proceso de enseñanza y aprendizaje todo un reto. Tomar en cuenta los aspectos reales que construyen la educación es tarea de todo docente.

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  3. Que buena frase la que usás: "Hay profesores de título y profesores de vocación. Hay profesores que explican y profesores que intrigan", y esa es la verdad de la gran mayoría de profesores universitarios, somos profesionales y la docencia es un "duendecillo" que llevamos dentro y lo ponemos a la orden de la docencia, de una institución y de nuestros alumnos, por ellos creo firmemente en que debemos ser buenos motivadores de nuestros alumnos al impartir las lecciones. Saludos

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    1. Hola Rita,

      El ver a nuestros alumnos motivados y aprendiendo a aprender es un motor que nos impulsa a continuar siendo facilitadores de vocación. Por supuesto, no nos olvidemos de la capacitación y actualización constante que conlleva el ser un docente. Mil gracias por tu comentario.

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  4. Estimada compañera, muy acertado su artículo, comparto su pensamiento cuando se refiere al pecado del ignorante referido al no querer saber, para mí se traduce en: "que no hay peor ciego que el que no quiere ver" y esto por como bien indicas no saber algo no es un problema lo peor es no querer saberlo...La vocación es sumamente importante en la docencia, es una motivación intrínsica definitiva.

    Saludos,

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    1. Hola Andrea,

      Todos los días encontramos profesores que muestran su miseria cada vez que hablan de su oficio de enseñar. Muchos se ven desgastados mentalmente porque ven solamente el punto negro en la hoja blanca. Si utilizaran esa energía desarrollando una actitud positiva y significativa en su trabajo diario otro gallo cantaría. Estoy segura de que su cara y su alma tomarían otro brillo. La motivación no es en vano. Es una necesidad como lo es el respirar. No podemos cerrarnos ante una sociedad cambiante que demanda nuestra acción y dinamismo.

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  5. Krisia:

    En lo personal, leer tu blog a sido muy gratificate, tienes un redacción muy clara, y muchas ideas generadoras. Me gustaría referirme a lo que mencionas "...Hay profesores que les dan todo a los alumnos sin dejar nada a la imaginación ni a la investigación y hay profesores que cultivan el gusto y despiertan el espíritu de aprender...", me llama mucho la atención, porque las nuevas tendencia en pedagogía mencionan que menos es más, y este paradigma es totalmente diferente al que nos formarmos, donde calificabamos a los profesores como buenos o malos, según la cantidad y extensión de los temas expuestos, sin importar si los estudiantes entendíamos o no. La ciencia de estos docentes era tener la presentación con más información, detalles y loo demás no importaba. Que dicha que ahora nos hemos dado cuenta que es mejor dejar los conceptos claves clarificados y hacer preguntas generadoras, que motiven al estudiante a profundizar sus conocimientos.

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    1. Hola Sindy,

      Agradezco mucho tu comentario.

      Es común escuchar a los alumnos quejarse por los trabajos y asignaciones que deben de realizar. Parece ser que les cuesta y les duele pensar de manera creativa y crítica. Es por eso que agradezco a los profesores estrictos y demandantes que he tenido en mis años de estudio. Sus enseñanzas han sido pilares en mi formación docente. Al reflexionar en la manera en que aprendí, siento que me sacaron el jugo y eso me ha ayudado a crecer y a cambiar. El cambio duele pero regenera.

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  6. Estimada compañera:

    Al leer su artículo, me hizo recordar un artículo que saliera sobre don Omar Dengo en el 2009, que indica:

    "Don Omar veía la educación como un medio de superación más espiritual que económico: “llegué también a creer que redimir al hombre de la miseria, sin redimirlo de la pasión y del vicio y de la ignorancia, no es ninguna seria solución de ningún problema”.

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    1. Hola Vane,

      Seríamos muy retrógradas si viéramos la educación como una manera de ser profesionales en lo académico y una manera de ganar dinero. Si en el aula no se refuerza la empatía, la negociación, el respeto, los valores, no podríamos hablar de una educación integral. Que sabio Don Omar Dengo al ver en todo y no únicamente una parte.

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  7. Me encanta la frase utilizada de Sócrates, y sobre todo crea el sentido de responsabilidad que debemos hacerlo parte de nuestra labor como docentes, la motivación y la innovación, son factores que deben estar adheridos a nuestro profesionalismo.

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    1. Hola Mariela,

      Muchas gracias por tu comentario.

      Al poner en práctica nuevos métodos y estrategias de enseñanza y aprendizaje, nos estamos reinventando como docentes e individuos que pueden hacer la diferencia en una sociedad cambiante.

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  8. Me encantó esta parte:
    "Las aulas están llenas de estudiantes que son diamantes en bruto dispuestos a aprender, pero que necesitan guía para pulir sus competencias". esta es nuestra oportunidad, es la mejor manera de trabajar desde una perspectiva diferente, en donde solamente es necesario ser un buen guía... función indispensable para lograr lo que se necesita en las aulas...

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    1. Agradezco mucho tu comentario.

      El tener una perspectiva diferente de las cosas nos hace más flexibles y amplía nuestra mente. Si constantemente estamos innovando y construyendo junto con nuestros alumnos vamos a generar más y más ideas ya que los alumnos son fuente inagotable de ideas frescas y creativas.

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  9. Hola Krissia:

    Me gustó mucho su descripción: "Hay profesores de título y profesores de vocación. Hay profesores que explican y profesores que intrigan..." Cuando sea grande me gustaría ser uno de esos docentes.

    Siento que la motivación es una vía de dos sentidos. El o la estudiante tiene algún nivel de motivación para aprender, ello motiva al docente a encontrar formas de apoyar su desarrollo, lo cual refuerza la motivación estudiantil, que incrementa la docente y así en una espiral virtuosa en la que todos y todas se benefician.

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    1. Al motivar vamos a obtener una situación en la que todos ganamos. Se obtiene más entusiasmo, más creatividad, más ideas innovadoras, y la satisfacción de haber sido parte del proceso.

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  10. Tocas un tema relevante, en cuanto a la concepción de la motivación, la cual no consiste solamente en felicitar por cada paso correcto que se da en el proceso de aprendizaje, sino además en identificar y señalar de manera clara pero asertiva los errores y las oportunidades de mejora que se tienen. Ambos elementos son claves para que los estudiantes perciban nuestro genuino interés en su aprendizaje, y además que efectivamente el docente es un facilitador que conoce la materia y que está capacitado para orientar su proceso formativo.
    Se puede (debe) ser estricto pero asertivo, y no debemos los docentes olvidad nuestro rol de facilitadores o mediadores entre el estudiante y los contenidos.

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    1. El ser claros y asertivos nos da valor como profesionales e individuos. Los límites bien delineados son apoyo para el profesor y el estudiante.

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  11. Krissia
    Ha sido un honor para mí leer artículo tan bonito y gratificante. La frase de Sócrates me llegó mucho, debido a que muchas veces pecamos de orgullosos.Estoy muy de acuerdo con su división en cuanto a profesores de vocación y de titulo: ¡Qué lamentable es que haya tanto "profesional" que aún vea la educación como un negocio fácil de ganar una extra, cuando ésta profesión está llena de nobleza. Ojalá que los participantes de este curso sepamos darle a la educación el lugar que se merece.

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  12. Hola, Errol,

    Las frases de personajes ilustres son centrales en cualquier trabajo. Es por esto que siempre trato de buscar una. La vocación de enseñar es una bendición y como tal debemos cultivarla todos los días. Esta preparación a la maestría es una excelente oportunidad de hacer la educación una experiencia gratificante.

    Saludos,

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  13. Estimada Krissia, evidentemente, el docente que disfruta con su profesión, le gusta enseñar (motivación intrínseca), será capaz de transmitir ese entusiasmo a sus estudiantes. Sin embargo, esto no es suficiente, ya que los estudiantes perciben el entusiasmo como algo ajeno a ellos. Entonces, cómo docentes, ¿qué debemos hacer para motivar a nuestros estudiantes?

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  14. Estimada Profesora,

    Como docentes debemos nutrir tal motivación intrínsica porque es algo que los estudiantes perciben fácilmente.

    Por otro lado, debemos de actualizarnos y de usar diferentes estrategias, métodos, herramientas tecnológicas en nuestras clases y pedirle a nuestros alumnos el uso de las mismas.

    En mi clase de Inglés III de este cuatrimestre, les presenté a mis alumnos mi primer presentación Prezi que hice para este curso. Ninguno de mis alumnos había visto o utilizado este software. Entonces les asigné un trabajo donde debían presentar la información utilizando Prezi. Los resultados fueron excelentes. Ellos mismos consideraron la experiencia muy útil no solo para la universidad sino para su trabajo.

    Este es un simple ejemplo de motivación. Yo les dije que si yo podía, ellos también lo iban a hacer.

    Otro aspecto para motivar a los alumnos es mostrar interés por lo que hacen y darles una realimentación oportuna, enfocada a áreas de mejora. En mi caso, como profesora de inglés siempre estoy monitoreando a mis estudiantes, su pronunciación, gramática, vocabulario, ortografía entre otros. Soy exigente y no me canso de corregirlos ya que es una oportunidad de mejora en su aprendizaje de una segunda lengua. Pero siempre acompaño tal monitoreo con material de apoyo que puedan consultar y usar con el fin de mejorar sus habilidades en inglés.

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